¿Te has sentido agobiado por no encontrar tu móvil en el bolsillo o en el bolso cuando sales de casa?
¿Te enfadas cuando no tienes conexión?
¿Alguna vez has tenido una discusión con tu pareja por estar enganchado al móvil?
Puede ser que estés padeciendo una Adicción tecnológica, o tal vez nomofobia…
En la actualidad utilizamos nuevos canales de comunicación y las personas tienen la ventaja de relacionarse de un modo más rápido y cómodo , pueden establecer múltiples contactos y tienen la oportunidad de atender a cientos de personas de forma simultánea.
La tecnología y las redes sociales suponen un avance en la forma de comunicarnos pero también está generando nuevos trastornos psicológicos que debemos conocer y que os describimos a continuación.
El síndrome de la llamada imaginaria: El usuario de teléfono móvil cree que su móvil ha sonado o ha vibrado. La explicación que se da es que nuestro cerebro ha empezado a asociar al teléfono móvil con cualquier impulso que recibe, especialmente si estamos estresados.
La nomofobia: Es la angustia causada por no tener acceso al dispositivo, esto puede desencadenar desde incomodidad hasta un ataque de ansiedad.
Síndrome de la depresión del Facebook: Se genera por la angustia de no tener los “me gusta” que se buscaban, o que sus contactos tengan a su vez más “amigos” que él en la red social.
Síndrome del fin de Facebook: La persona se siente deprimida al no cumplir con sus expectativas en la red social, la cual puede ser tener muchos amigos, o en su defecto pocos y de repente verse abrumado por muchas solicitudes de contacto.
Con la popularización de las RSI se ha identificado una diversidad de nuevas conductas en las sociedades y sus individuos y en lo que se refiere a salud hoy en día se habla de un nuevo género de «adicciones» como la Adicción a Internet o la Adicción a las redes sociales»
La adicción a Internet o a las redes sociales: Es la necesidad de estar todo el tiempo conectado y en cualquier lugar.
Como cualquier otra adicción presenta elementos comunes a cualquiera de ellas y están descritos en la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud (CIE-10)
- Las redes sociales dominan sus pensamientos y sus conductas.
- Invierte gran cantidad de tiempo y esfuerzo en esta actividad.
- Altera sus estados emocionales, ansiedad, enojo…
- Se perturba cuando es interrumpido en el acceso o se le reduce el mismo ( abstinencia).
- Comienza a tener problemas con las personas que le rodean por persistir en la actividad y eludir responsabilidades familiares y laborales.
- Niega tener consecuencias por la actividad y se jacta de poderla abandonar en cualquier momento pero no lo hace.
- Reanuda la actividad de manera ansiosa una vez que se supone que la había reducido o abandonado ( recaída).
Además de estos síntomas que hemos visto y que son comunes en cualquier adicción pueden aparecer estas conductas:
- Descuida las actividades laborales, de familia y de pareja.
- Privarse de sueño por estar conectado.
- Distorsión del tiempo en que se está conectado. Normalmente afirman haber estado menos tiempo enganchados que el real.
- Irritarse por no haber conexión.
- Aislamiento social : Consiste en limitar las relaciones interpersonales a las que se dan en la red y no relacionarse de forma presencial.
- Evadir responsabilidades.
- Estar todo el tiempo hablando de las redes sociales aunque no se esté conectado.
Síndrome de dependencia de videojuegos en línea: Es la necesidad de estar jugando todo el tiempo en le teléfono móvil o en la red.
Síndrome del efecto Google: En este el afectado se niega a almacenar información, y en lugar de recordar las cosas, cuando surge alguna duda usa el buscador para aclararla.
La cibercondria: Puede ser el más común, pues los usuarios tienden a proyectarse con lo que leen en la red. La cibercondria es un trastorno donde la persona se convence de que padece alguna o varias enfermedades de cuya existencia se enteró en Internet.
Como siempre os comento que debemos hacer uso de nuestro sentido común y no dedicar más tiempo que el debido a las redes sociales y vigilar a los pequeños que tienen en sus manos un arma muy útil pero al mismo tiempo muy peligrosa como es la tecnología.
Prevenir es mejor que curar y os dejo unas recomendaciones basadas en estudios de conducta humana que os pueden ayudar para que apliqueís en vuestra familia.
- Establece tiempos para usar los dispositivos. Los padres deben establecer una dieta digital, es decir, indicar por ejemplo cuándo y cuánto se puede utilizar el ordenador, al igual que lo hacen con la comida o con el dinero, o con cualquier otra cuestión doméstica.
- Pon el dispositivo en un lugar en el que puedas supervisar los contenidos a los que accede.
- Intenta que realicen actividades de tipo deportivo , al aire libre y con gente de la misma edad.
- Conoce el uso y los peligros de las redes sociales para poder informar a tus hijos y comentarle los límites y las ventajas de las mismas.
Si tienes cualquier problema, adicción tecnológica, trastorno del comportamiento o del estado de ánimo asociado al uso de las Redes Sociales no dudes en consultar con un profesional.
Yo puedo ayudarte.
Pepa Fernández, psicóloga
